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Retornados 

Viajar como forma de vida. Vivir en el extrajero. Parejas internacionales. Estudiar o trabajar fuera de tu país. Moverte como nómada digital. 

Cada vez somos más las personas que, por distintos motivos, hemos vivido fuera de nuestro país de origen por largo tiempo. Quizás empieza como una pequeña aventura de unos meses o con un visado o contrato de tan solo un año. Pero es frecuente que nuestra vida se enrede y que por razones profesionales, de estudios, de pareja, por nuestra propia curiosidad y perseverancia, o por las oportunidades que se nos presentan, acabemos varios años en un lugar que pasa a ser parte de nosotras mismas. Nuestros intereses, gustos, forma de pensar e inquietudes cambian y ya no somos 100% de un lugar. Así por lo menos lo he vivido yo y muchas personas con las que he trabajado en este proceso de desarrollo personal y toma de decisiones.  

Cuando una etapa vital termina es bueno hacer balance, reflexionar y quedarnos con todo aquello que hemos aprendido, lo que nos ha nutrido y lo que decidimos llevarnos con nosotros mismos hacia el futuro. Después de mucho tiempo pensando en si volver a nuestro país de origen o quedarnos, hay que tomar la decisión. En este caso, retornar al país de origen o cambiar de país o ciudad en el caso de estudiantes o nómadas digitales, es un cambio marcado por una mudanza y muchas despedidas.  

Tengo el privilegio de trabajar apoyando a personas que están pasando por este proceso. Generalmente son jóvenes que deciden empezar un proceso de desarrollo personal para conocerse mejor, aclarar objetivos futuros y vivir una vida más consciente, más acorde a los aprendizajes y valores adquiridos tras la experiencia de haber vivido en distintos lugares. Estas decisiones no son fáciles, pues frecuentemente implican dejar un trabajo estable, una vida dinámica y mucha estimulación diaria pero a cambio de estar con la familia, una nueva carrera profesional, estudios o proyectos personales que hacen ilusión.

Cuando es el momento de partir de nuevo, repasamos lo importante: aprendizajes vitales, fortalezas personales, relaciones importantes, valores que guían nuestro camino y objetivos futuros. Hacia el final del proceso, cuando la persona se encuentra en los días próximos a su partida con despedidas de amistades importantes, regalando cosas de casa, haciendo maletas y cajas, y disfrutando de sus lugares favoritos les sugiero la siguiente reflexión:

Tu mochila de aprendizajes

• Mientras preparas tus maletas con lo importante que quieres mantener y llevarte contigo: tu ropa favorita, tus libros más preciados, tus objetos más valorados, etc. considera tomarte un tiempo para preparar también una mochila pequeña pero también muy importante.
• En tu mochila de aprendizajes cabe solo aquello que te será útil y valioso de todo lo que has aprendido y vivido en los últimos meses/años. Es parte de tu autoconocimiento, de tus valores personales, son tus reflexiones más íntimas.
• Esta mochila no es visible desde el exterior, pero siempre la llevarás puesta y los demás podrán notarlo porque tú has cambiado.
• ¿Qué te llevas contigo en esta mochila? Aquí van algunos ejemplos personales y de otras viajeras, aventureros y nómadas que he tenido el placer de conocer a fondo:

Confianza en mí misma, en mi sabiduría interior o intuición. Confía. Sigue tu corazón.

Contacto con la naturaleza que siempre estará allá a donde vaya.

Ser yo mismo, escuchar la voz del miedo pero seguir mis objetivos.

Valentía para probar nuevos caminos.

Estoy preparado para empezar una nueva vida, ya lo he hecho antes.

Estar cómoda conmigo misma, expresarme como soy (aunque no siempre sea bien recibido por los demás).

Me permito probar y correr el riesgo de que las cosas no salgan como yo quiero o me imagino.

Apuesto por mí, mis proyectos y mis ideas.

Al final, lo más importante es invertir en nuestro bienestar, independientemente de dónde nos encontremos.

Cuando te encuentres en un periodo de transición vital, hazte estas preguntas y cultiva tu bienestar psicológico. El desarrollo personal es la mejor inversión para tu futuro.

¿Qué te ha ayudado a ti en momentos de transición?

¿Qué meterías tu en tu mochila de viaje vital?